¿Por qué el crimen organizado “ayuda” al Estado en la cuarentena?
Por: Reynell Badillo Sarmiento
Link: https://lasillavacia.com/silla-llena/red-de-la-paz/crimen-organizado-ayuda-al-estado-la-cuarentena-72283
En Colombia y algunos Estados de Latinoamérica ha surgido un fenómeno extraño: los grupos del crimen organizado están “ayudando” al Estado a mantener la cuarentena obligatoria.
En medio de la crisis generada por el covid-19, ha sido habitual cuestionar cómo reaccionarán los mercados criminales ante la imposibilidad de distribuir la droga en los principales mercados del mundo, afectados por la pandemia. Los precios de la droga han aumentado y los insumos para su transformación escasean.
Asimismo, los canales de distribución habituales (ventas en vía pública, bares, fiestas, entre otros) van a estar frenados debido a las cuarentenas obligatorias. A esto, algunos investigadores han planteado que se puede asistir a la comercialización ilegal de bienes legales (como Jorge Mantilla) y que, si bien la conflictividad armada puede disminuir, también aumentará la conflictividad social (como Luis Trejos).
En Colombia y algunos Estados de Latinoamérica ha surgido un fenómeno extraño: los grupos del crimen organizado están “ayudando” al Estado a mantener la cuarentena obligatoria. En Antioquia, Cauca, Córdoba, Magdalena y Nariño han aparecido panfletos y cadenas de Whatsapp en las que se establece que la muerte será la sanción por incumplir la cuarentena. Coinciden en estas medidas grupos como el Clan del Golfo, el ELN, Los Caparros y las Autodefensas Conquistadores de la Sierra Nevada (Acns), por solo mencionar algunos ejemplos. De hecho, en Montelíbano (Córdoba), Los Caparros declararon objetivo militar a todo negocio que “abusara de los precios” y en zona rural de Santa Marta las Acns han prohibido la llegada de turistas y han establecido que solo vehículos como “ambulancias y de transportes de alimentos” podrán circular.
Es cierto que las AGC en su página han negado que esos comunicados sean suyos. Sin embargo, allí también han negado que asesinen líderes sociales y rechazan “cualquier ataque indiscriminado a la población civil en el Bajo Cauca”, por lo que es difícil confiar en sus pronunciamientos para desmentir la información. Además, líderes sociales en el sur de Córdoba han dicho que se han realizado reuniones para confirmar las prohibiciones. Entonces, La pregunta es ¿por qué grupos del crimen organizado que se supone retan al Estado, al mismo tiempo toman una decisión para ayudarlo en sus disposiciones?
Ofrecer una respuesta ante contextos de violencia tan disímiles es complejo y siempre existe un riesgo de generalización. Sin embargo, si hacemos referencia a las lógicas criminales de estos grupos es posible obtener pistas. En primer lugar, al enviar estos mensajes los grupos armados consolidan su presencia territorial y le demuestran a la población que, aun en medio de esta crisis, existe un orden armado particular que permanece. A través del miedo logran mantener estable su predominio en el territorio y reafirmar su lugar en la estructura político-social de los municipios en los que están.
En segundo lugar, los grupos del crimen organizado, a diferencia de lo que sucedía con los insurgentes durante el conflicto armado, no pretenden retar al Estado ni hacerse con el poder político, sino que se benefician del statu quo y, por ende, les conviene que el estado de cosas se mantenga tal cual está. Dicho de forma más sencilla, a los grupos armados les conviene la débil presencia del Estado en sus territorios, porque así pueden realizar sus acciones armadas sin que sus ganancias económicas se vean afectadas.
Al apoyar la cuarentena obligatoria, los grupos armados intentan evitar que haya brotes del coronavirus en sus territorios y, consecuentemente, que el Estado tenga que hacer presencia -a través del sistema de salud- y que estos municipios sean visibles a escala nacional -a través de medios de comunicación-. Ayudar al Estado a mantener la cuarentena es, en realidad, impedir su fortalecimiento a nivel territorial.
Finalmente, un brote de coronavirus al interior de las filas de estos grupos armados implicaría graves riesgos para su actividad criminal por dos razones particulares: 1) no cuentan con recursos médicos para atender la situación y 2) esto los obligaría a acudir al sistema de salud, en donde serían fácilmente identificables por las autoridades. Prohibir la circulación de personas en estos tiempos es, también, un acto de supervivencia para estas entidades armadas.
En síntesis, el hecho de que las organizaciones criminales “ayuden” al Estado a mantener la cuarentena responde a una manera de reafirmar el orden armado que han establecido, a impedir el fortalecimiento de la presencia estatal en los territorios y a un acto de supervivencia ante la imposibilidad de atender una emergencia sanitaria de esta magnitud.
Por supuesto, esta situación debería hacernos reflexionar sobre la ineficacia del Estado colombiano para garantizar la seguridad de una buena parte de su población y sobre la difícil situación de esos ciudadanos que, en medio de la pandemia, también deberán preocuparse por no ser asesinados, extorsionados y amedrentados por los grupos armados, que no necesariamente van a dejar de lado todas sus actividades criminales. Hay colombianos que están en confinamiento desde mucho antes de que empezara esta crisis.